¿Qué Hace

Un Dermatólogo?

Es el especialista que estudia la piel, pelo, uñas y mucosas, y es el más indicado para recomendar cuidados de la piel y realizar procedimientos estéticos que mejoren la apariencia.

¿Cuánto tiempo tiene que estudiar un médico para ejercer dermatología?

El tiempo promedio para obtener el título de Médico Especialista en Dermatología es de una década (seis años de medicina general, un año de medicina interna y tres de dermatología). Si además se desea cursar una alta especialidad se agregan uno o dos años más.

¿Cuáles son las altas especialidades de la dermatología?

  • Dermatooncología (Dermatología Quirúrgica)
  • Dermatopatología
  • Micología
  • Dermatología Pediátrica
  • Dermatología Cosmética
  • Fotobiología (Fotomedicina)
  • Tricología

¿Por qué es importante acudir con un médico especialista en dermatología certificado por la SMD?

Acudir a consulta con un médico especialista miembro de la SMD significa contar con la seguridad y confianza de estar en manos de un profesional certificado, que ha cumplido con todos los requisitos académicos y el entrenamiento necesario para brindar atención médica de alto nivel.

¿Quién debe acudir al dermatólogo?

Cualquier persona que presente síntomas, molestias o afecciones en piel, pelo, uñas y mucosas, así como a quien desee mantener su piel sana y bella.

¿Cómo sé en qué momento debo consultar a un dermatólogo?

Si se presentan alteraciones y síntomas en la piel, el pelo y en uñas lo adecuado es acudir a consulta dermatológica. En caso de tener lunares o piel delicada, lo indicado es acudir a revisiones periódicas. Si se es sano, una revisión anual es lo recomendable.

¿Por qué es importante que mi dermatólogo esté certificado?

Porque significa que el especialista cuenta con las competencias y conocimientos necesarios para brindar sus servicios profesionales de manera segura, ética, y responsable. La SMD verifica que sus socios cumplan con esta certificación de manera periódica.

Enfermedades

Frecuentes

Existen cientos de afecciones en la piel, uñas y pelo, sin embargo, hay enfermedades que son más comunes que otras, por lo que esta lista sólo abarca los padecimientos más frecuentes y relevantes en la consulta diaria de la especialidad. Si tienes alguna duda o inquietud, acude a consultar a tu derma.

Evita la auto medicación y los tratamientos no supervisados, encuentra al dermatólogo adecuado para ti.

Es la causa más común de consulta dermatológica. Es causado por acumulación de sebo (grasa) de los folículos, obstrucción de sus orificios de salida, presencia de la bacteria Cutibacterium acnes y respuesta inflamatoria. Es más común entre adolescentes, aunque puede prolongarse hasta la edad adulta. Tu derma puede prescribir el tratamiento adecuado según tu tipo de acné.

Es una enfermedad crónica e inflamatoria, en la que aparecen áreas enrojecidas con escama blanca y gruesa. Su causa es desconocida. Se ve más en codos, rodillas, cuero cabelludo y espalda baja, pero puede afectar cualquier parte de la piel y las uñas. Es una enfermedad que puede controlarse si sigues las indicaciones de tu derma.

Es la enfermedad más común en la edad pediátrica, es crónica y recurrente. Se observa piel seca con áreas de “dermatitis” (piel llorosa, roja e irritada), con mucha picazón, suele afectar párpados, cuello, pliegues de codos y rodillas. Resulta de la combinación de factores genéticos, ambientales e inmunitarios, dando una piel con mala función protectora. Requiere tratamiento dermatológico y una rutina de cuidado diaria que tu derma puede prescribir.

En México, el cáncer de piel ocupa el segundo lugar entre todos los cánceres.

El cáncer más letal es el melanoma maligno, que puede presentarse como manchas o tumores de coloración desigual (en uñas a menudo se mal diagnostica como onicomicosis), pero los más comunes son el carcinoma basocelular y el carcinoma espinocelular que se observan como úlceras sangrantes que no sanan. Los principales factores son las características genéticas, el tipo de piel de cada persona y las radiaciones ultravioleta.

Es importante consultar con el derma de confianza para una revisión, sobre todo si se tiene historia familiar de cáncer o antecedentes de exposición intensa al sol. También es necesario utilizar medidas de protección solar (ropa y bloqueador).

Esta enfermedad produce manchas blancas por inactivación o destrucción de los melanocitos (células encargadas de darle color a la piel). Su causa es desconocida, pero se considera de origen autoinmune (células de defensa que destruyen a las células de la piel). Su evolución es impredecible, y no debe confundirse con el mal del pinto (provocado por microorganismos contagiosos). Es posible repigmentar la piel con ayuda de tu derma.

El melasma o “paño”, es una pigmentación que afecta principalmente la cara con manchas de color café. Afecta a ambos sexos aunque predomina en mujeres de mediana edad y de piel bronceada o morena. Los factores principales son genéticos, radiaciones solares, uso de anticonceptivos o embarazo (y no tiene relación con enfermedades de otros órganos). Hay múltiples opciones de tratamiento, empezando por el uso de un bloqueador solar adecuado.

Conocida coloquialmente como “jiote”, es muy común en niños de edades escolares y se caracteriza por manchas pálidas en la cara, hombros y brazos. Se relaciona con piel seca, mala hidratación, bacterias propias de la piel (estafilococos) y exposición excesiva al sol. Es falsa la creencia popular que la señala como consecuencia de deficiencias vitamínicas. No te automediques y acude con tu derma.

Son infecciones de la piel, pelo y uñas causadas por hongos de mayor incidencia  en climas tropicales. En el cuerpo se observan como lesiones redondeadas con el borde más enrojecido que el centro y con escamas, en la cabeza se ven áreas sin pelo con puntos negros (en ocasiones hay inflamación con pus, por lo que el médico no entrenado en dermatología puede confundir las lesiones con abscesos, en esos casos el tratamiento equivocado, complica el padecimiento). En la planta de los pies se conoce como “pie de atleta” con escamas, grietas y mal olor, y en uñas provoca engrosamiento, coloración amarillenta y desmoronamientos. Si no son tratadas por un derma calificado se corre el riesgo de extensión y contagio a otras personas.

Consiste en una inflamación del cuero cabelludo, con enrojecimiento y mayor producción del sebo que produce escamas en la superficie. Su origen se debe a diversos factores como la genética, ambiente, hormonas, emocionales y en ocasiones hongos de la flora cutánea, pero no siempre están presentes, por lo que es incorrecto llamar a estos microorganismos como “hongo causante de la caspa”. Acude con tu derma para lograr un buen control.

Se trata de una reacción de la piel ante una sustancia irritante o a la que se es alérgico. Aparece en cualquier parte del cuerpo que haya tocado la sustancia, pero es más común en las manos. Se puede manifestar como enrojecimiento, pápulas (“granitos”), hinchazón, escamas y en ocasiones con ampollas; se acompaña de sensaciones de ardor y picazón. Sólo acudiendo con tu derma podrías reconocer las sustancias a las que eres alérgico(a).

Preguntas Y

Respuestas

No existe una fórmula única para encontrar el equilibrio entre la exposición moderada y excesiva debido a que cada tipo de piel y cada organismo tienen una tolerancia distinta al sol.

Una manera segura de cuidar la piel es usando bloqueadores solares, cubriendo la piel con ropa protectora y usando sombrero durante las horas de mayor radiación, alrededor del mediodía.

Una piel sana es una piel bella. El cuidado de la piel se enseña y se aprende desde la infancia, mediante una higiene adecuada y elementos de hidratación y protección solar. En cada etapa de la vida la piel requiere cuidados específicos. A partir de la tercera década la piel requiere de mayor atención y cuidados específicos. Como cada ser humano, cada piel es única. La consulta dermatológica es el primer paso para educarse sobre el cuidado de tu piel.

Utilizando un bloqueador solar adecuado no sólo en exteriores, sino también en interiores; se ha demostrado que la luz que emiten dispositivos electrónicos como celulares, computadoras, pantallas y tabletas alterar la producción de melanina (la sustancia que da color a la piel). Se puede complementar esta protección con el uso de recursos físicos como sombreros, ropa y sombrilla.

Si, es necesario utilizar protección solar durante todo el año, sin importar la temporada, ya que las radiaciones ultravioletas son constantes sin importar la estación del año; por ejemplo, la luz que refleja la arena es tan potente como la que refleja la nieve.

Puedes iniciar con una rutina de aseo con un jabón neutro ó dermolimpiador para piel grasa, además de no tocar las lesiones ni pellizcarlas para no provocar la aparición de cicatrices, ¡No te automediques! Acude a consulta dermatológica.

Es indispensable confirmar primero en consulta dermatológica que se trate de una alergia cutánea. Según el tipo de alérgeno y la valoración adecuada se recomiendan las pruebas específicas que confirmen la alergia y el tratamiento adecuado.

 

Acudiendo a consulta dermatológica, tu médico especialista tiene la capacidad de valorarte y ver cuáles son tus necesidades según tu edad, características propias de tu piel, actividades que realizas, ciudad en la que vives, estación del año, etc.

Las cicatrices son permanentes, sin embargo, durante una cita con tu derma se valoran las características específicas de cada cicatriz y se pueden ofrecer tratamientos y técnicas para mejorar el aspecto de cada una; cada cicatriz es única y el resultado del tratamiento también lo es.

Es la especialidad médica que estudia el cuidado de la piel, pelo, uñas y mucosas, así como del diagnóstico y tratamiento de los padecimientos que los afectan.

Es el órgano más grande del cuerpo, con funciones hídricas, endocrinológicas, inmunológicas, neurológicas y sensoriales complejas que nos permiten la adaptación e interacción con otros organismos y el medio que nos rodea, así como su defensa. Además que nos permite una interacción social compleja al verla, tocarla, admirarla etc.

Porque es insustituible, no existe un reemplazo completo (ni artificial ni natural) que pueda suplir sus funciones vitales tan complejas y diversas, además su aspecto permite comunicar mucho de tu persona a los demás.

Es el cambio que resulta de las radiaciones solares y lumínicas que se acumulan con el paso del tiempo. La piel se ve adelgazada, manchada y flácida.

Evitando exponerse demasiado al sol

  • Llevando una dieta balanceada
  • Manteniendo el cuerpo hidratado
  • Controlando el estrés
  • Limpiando diariamente y tratando con gentileza el cuerpo 
  • Consultando con un médico dermatólogo certificado cuando se requiera

Es una neurotoxina que induce una parálisis controlada y temporal de los músculos. Se utiliza, por ejemplo, para atenuar las arrugas de la cara y sólo debe de ser aplicada por médicos especialistas con experiencia.